Se quiere hacer fuerte con dos premisas que ya esperábamos, como que el Motorola Moto X estará ensamblado en el país americano. La segunda, mucho más llamativa y protagonista del anuncio, es que habrá un factor de personalización a la hora de comprar el producto.
¿Personalizando por catálogo?
Podemos divagar y opinar mucho sobre este tema, pero no hay absolutamente nada más que una frase: “Diseñado por ti”. Lo que interpreto es que habrá una serie de aspectos opcionales, como los colores, materiales, o incluso posibilidad de elegir especificaciones más definitorias, como la cámara, batería o la resistencia.
El tema de la personalización no es nuevo, lo introdujo uno de los asesores de la legendaria firma de telecomunicaciones, Guy Kawasaki. Se atrevió a hablar en el mes de marzo sobre teléfonos que configuramos de la misma forma que se hace cuando se compra un coche, con opciones por catálogo. En el mundo de la tecnología encontramos muchos ejemplos de equipos configurables, con los ordenadores Dell como mayor exponente.
Debemos partir de la idea de que un teléfono móvil es un elemento bastante cerrado de producir, en cuanto jugamos con componentes internos, si la tirada no es grande, el precio se puede disparar. Se puede ganar algo en flexibilidad con el ensamblaje en Estados Unidos, pero donde seguro que van a ganar es en valorar el trabajo de un producto que terminan de crear ellos mismos. Ya veremos cómo funciona este sentimiento patrio en futuros resultados financieros.
Al margen de las configuraciones, esperamos que se note la mano de Google en estos primeros productos en una nueva Motorola, en diseño y software, que dicho sea de paso ya se relacionan con el nuevo logo de la empresa del buscador.
Motorola Moto X, qué se rumorea por la red
Empezamos comentando una noticia que ha saltado hace unas horas, y es interesante porque ayuda a no liarnos con el catálogo de Motorola: Moto X no tiene nada que ver con la familia Droid. Conocemos que hay un nuevo Droid en desarrollo para la operadora Verizon – con la que seguirán sacando teléfonos -, y no hay relación con el teléfono que es protagonista de nuestro artículo.
Me gustaría conocer qué opináis vosotros al respecto, pero también aprovecho para hacer un repaso de todos los rumores que se mueven por la red en los últimos días, algunos más creíbles que otros:
la fecha de salida esperada está en el mes de agosto, nos cuentan que ha habido algún retraso y debería haber estado antes en el mercado, pero no habrá más movimiento en las fechas.
La operadora AT&T tendrá una exclusiva de tres meses. En noviembre estará disponible con el resto de operadoras americanas. El rumor no suena bien teniendo en cuenta la estrecha relación de Motorola con Verizon.
No parece haber dudas de que estamos ante un teléfono con conectividad LTE, que funcionará en todas las bandas.
Se habla de un modo “siempre escuchando”, con el que el teléfono espera comandos de voz para despertarse. La tecnología ya existe – Voice Activation -, la tiene Qualcomm en su Snapdragon 800.
Otros rumores apuntan a que el hardware no será tan potente, para que el precio final no sea tan caro, y en lugar del Snapdragon 800, se quede en el 600. Otros apuestan incluso por un nivel inferior, con el doble núcleo del Snapdragon 400.
Otro de los campos donde trabajan Google y Motorola es en el de la predicción de aplicaciones y comandos dependiendo de cómo cojamos el teléfono. Moto X podría ser un buen sitio para ponerlas en práctica. Una evolución de Motorola SmartActions mezclada con Google Now.
No se cree que las posibilidades de configuración lleguen al nivel de elegir chipset o cantidad de memoria RAM, sí suena más posible elegir la memoria interna disponible. Desde el punto de vista software, estaría bien que nos dejen elegir a nuestro gusto entre Android puro y personalización de Motorola.
Diferentes colores (hasta veinte, con combinaciones) y materiales para la carcasa. Lo primero suena más fácil, el segundo, más complicado y lógicamente más incidente en el precio final. Se habla incluso de madera, además de policarbonato y el kevlar de algunos Motorola.
Mayor protagonismo e integración de Chrome en el teléfono, que siempre estará comunicado con las diferentes versiones que tengamos abiertas del navegador.
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