
Como decía, es un pack un poco curioso, incluye las dos lentes, la carcasa para el iPhone que permite acoplar fácilmente dichas lentes y un adaptador para sujetar a dicha carcasa que nos permitirá utilizar el iPhone con un trípode. ¿A qué precio? Pues cerca de 200 dólares. En fin que la gente que quiere hacer fotos va directamente a una compacta o una réflex de gama baja, hacerse con el kit me parece caro y aventurado, aunque nos prometan que el “ojo de pez” tiene un campo de visión de 165º y el “gran angular” consigue un campo de visión un 35% más ancho.
Aunque las especificaciones de los objetivos no sean malas, aunque realmente se consigan buenas fotos con la cámara del smartphone… es que no tiene nada que ver con disparar tu cámara ya sea compacta o DSLR. Sin embargo si siguen proliferando este tipo de accesorios es que tendrán su público digo yo, aunque nunca he visto a nadie con este tipo de objetivos montados en su iPhone.